Al Jefe de La Legión: Gracias.

Esto de los tiempos de cambio… Cambiar todo y no cambiar nada, como suelen decir.

Volvemos al punto donde el misterio de nuestros destinos se hace patético. Mi hermano Ralph ha sido desterrado ( o enterrado… o…) Alguién consideró que hace excelentes dictados de rostro de vacas y afines.

Mi estimado Licenciado Paolí desapareció, fagocitado por algún diván.

Y yo?

De vacaciones en pleno Otoño!!!!! No es un lujo?


Pero no es esto lo que vine a decir…
***************************************************************************

Vine a agradecer, como co-fundadora de la Legión, la buena onda, la paciencia y la compañía de nuestro director.









Creo que jamás imaginó que el tiempo final de su servicio lo iba a pasar con un grupo de insanos con aires de artistas!

Esos minutos del famoso Café de los poetas ya no serán los mismos.

Gracias de corazón.



Ha sido un honor que dirigiera nuestra Legión y que compartiera nuestra idea de que no somos sólo números.



El estadístico: Charly Moon-
Los Lugartenientes
Susi-
Fer-
Giam-
RicBlot-
La chule-

Los Aurigas todo terreno
Nes-
Marcuchio-
Duvi-
Marian-

Los capitanes
El capitán Amor-
El capitán Wireless-
El capitán Carola (sobreviviente)
El capitán Nerón… el mejor rastreador del planeta!

Todos le agradecemos este tiempo!!!!

Lo mejor para Usted y su familia.

No es mucho pero entre sus cosas...llévese nuestro afecto

:)

Nos vemos!

P.D: entre nosotros… No se puede quejar… Emociones, lo que se dice emociones, no le faltaron!!!! (Aunque más de una vez nos haya querido acogotar)


Gracias Verónica, esposa de este Legionario, nos metimos miles de veces en tu vida a través del bip-bip del Sr. Nextel… upsss!!!!

A la pequeña escritora Michi:

Nunca abandones esa increíble manera de ser. Como me dijeron una vez... Nunca dejes de escribir!

:)

1 comentario:

  1. Chule, los legionarios van al cielo porq viven el infierno en la tierra... Ya vemos que gus se lo gano soportandonos!!! ;-)

    ResponderEliminar

en quince segundos, sin repetir y sin soplar...